La rosa que no fue entregada, la que quiso ser un gesto de amor. La misma que descansó a su lado, esperando por fin conocer a su destinatario. Llena de vida y de fuerza, pero incompleta, aguardaba bajo el sol la sonrisa de aquel que alguna vez sería su amor.
El Barrio París y Londres, en Santiago, vio a Valentina ser una mujer valiente que recorrió sus calles empedradas con el eco de un regalo sin destinatario. Peinada por el viento de una tarde de otoño y resplandeciente bajo la luz del sol, simplemente fue ella, para ella.
¿Qué esperar para preguntarle? Ella responde con su mirada, sin decir más de lo necesario. Arde en su interior, pero con la delicadeza de una flor. ¿A qué le tienes miedo?
En esta sesión urbana trabajamos únicamente con luz natural. La Canon 5D Mark III fue la encargada de retratar a Valentina, acompañada del Sigma 70-200mm f/2.8 OS HSM, que respondió de forma impecable. También utilizamos algunos pequeños trucos con la pantalla del celular para conseguir la atmósfera que buscábamos en este proyecto.
Como siempre, fue un verdadero agrado colaborar con Valentina; su naturalidad y facilidad para ser dirigida hacen que el proceso fotográfico fluya con total armonía.